La transportación eficiente siempre ha sido un asunto de gran importancia, debido a que es esencial para las sociedades humanas, así como para la supervivencia de especies biológicas. La evolución ha generado una rica variedad de soluciones exitosas, que han inspirado a ingenieros para diseñar sistemas artificiales óptimos. Un ejemplo de estos sistemas de transportación natural es el trazo de los caminos que crean las hormigas, para ir y volver en el menor tiempo al lugar de su fuente de comida. Un grupo de investigadores se propuso probar, en un estudio reciente, si estos insectos lograrían el mismo éxito en una situación de cuello de botella, es decir, un escenario en el que la gran interacción entre ellas causara retrasos en el flujo general. Se demostró que las hormigas, con base en la comunicación mediante feromonas, crean caminos alternos cuando un sendero tiene un alto nivel de densidad de tránsito, de modo que ...