En los países orientales se ha usado por miles de años la acupuntura para tratar afecciones diversas. Sin embargo, aunque se conoce su eficacia, es muy poca o nula la experimentación conducida con rigor científico para comprobar su acción.
En fecha reciente, una investigadora ha efectuado experimentos en ratones para comprobar si este método es efectivo en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson. Este padecimiento se caracteriza por movimientos musculares alterados debido a la degeneración de las células cerebrales que producen una sustancia llamada dopamina.
Esta científica inyectó a un lote de ratones una sustancia que destruye las células que elaboran este neurotransmisor. A la mitad del grupo le aplicó acupuntura cada tercer día detrás de la rodilla y encima de las patas; la otra no se sometió a ninguna técnica de acupuntura.
Después de una semana, los niveles de dopamina descendieron a la mitad en los animales que no recibieron acupuntura y tan sólo a 20 por ciento en los sometidos a la técnica.
Se presupone que este procedimiento puede restablecer en cierta medida el desequilibrio de las sustancias neurotransmisoras que existe en el Parkinson, pero aún falta llevar a cabo estudios con rigor científico en seres humanos para saber si es útil en la lucha contra este mal.
En fecha reciente, una investigadora ha efectuado experimentos en ratones para comprobar si este método es efectivo en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson. Este padecimiento se caracteriza por movimientos musculares alterados debido a la degeneración de las células cerebrales que producen una sustancia llamada dopamina.
Esta científica inyectó a un lote de ratones una sustancia que destruye las células que elaboran este neurotransmisor. A la mitad del grupo le aplicó acupuntura cada tercer día detrás de la rodilla y encima de las patas; la otra no se sometió a ninguna técnica de acupuntura.
Después de una semana, los niveles de dopamina descendieron a la mitad en los animales que no recibieron acupuntura y tan sólo a 20 por ciento en los sometidos a la técnica.
Se presupone que este procedimiento puede restablecer en cierta medida el desequilibrio de las sustancias neurotransmisoras que existe en el Parkinson, pero aún falta llevar a cabo estudios con rigor científico en seres humanos para saber si es útil en la lucha contra este mal.